Ralladas mentales

Con el cuerpo lleno de aventuras
pero frío, vacío de calor,
todos los días al sol
y sin ánimos por las alturas,
fue una sutil persona
que me llevó por un camino,
y quizás las cosa del destino
me encontrara con la luna.
Entre mensajes y dudas,
dunas removidas por la emoción,
alguna que otra obra de acción
y partes incompletas o mudas,
quise saltar por otra dimensión,
donde conquistarte en un segundo
y tener todo el tiempo del mundo
para poder querer un corazón.
Navegar por tus sentidos
y escalar por tu cintura,
ya que sacas al amante en mí,
porque lleva tiempo dormido
ese hambre de un mendigo
y la escasez de volver a sentir.
Así la recuerdo por su hermosura
y por lo que hizo cuando llegó aquí,
ella que continuó con mi locura
y después de tentarnos se volvió a ir.